El suceso se produjo en torno a las cuatro de la tarde, después de iniciarse un fuego en un pajar en el que se almacenan alpacas y diversa maquinaria agrícola, situado en el lugar de Cristelos.
También se encontraban animales en el lugar, aunque, según han indicado los particulares al 112 Galicia, fueron retirados de la estructura, así como las máquinas y otros enseres.
Nadie de la casa resultó afectado, pero sí uno de los bomberos, que pudo sufrir un golpe de calor mientras trataba de apagar las llamas.
Por este motivo, el hombre recibió asistencia en el mismo lugar del incendio, aunque no fue necesario su traslado. Los demás compañeros del parque del Baixo Miño continuaron trabajando para sofocar las llamas con la colaboración de efectivos del GES de A Guarda y Ponteareas y los Bomberos de Ribadumia.
También fueron informados los Bomberos de Vigo y los miembros del GES del Val Miñor. Igualmente, desde el 112 Galicia, se pidió la ayuda de los agentes de la Guardia Civil y de los voluntarios de Protección Civil de la localidad.
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